Es uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Granada. Sus casas blancas que ascienden por el promontorio dominado por el Castillo sobre las playas ofrece una imagen realmente espectacular. En esta visita a Salobreña en autocaravana callejeamos por su casco histórico hasta llegar al Castillo, y por supuesto, nos acercamos a sus playas de aguas cristalinas. Además, su gastronomía, basada en el pescado, es magnífica. No dejéis de probar los tradicionales espetos de sardinas junto a la playa
ÍNDICE
¿Dónde pernoctar en Salobreña con autocaravana o furgoneta?
Recientemente han habilitado un gran aparcamiento en donde se puede pernoctar con autocaravana muy cerca de la playa, junto a la Avenida de Andalucía, aunque no tiene servicios.
Ubicación: Avenida de Andalucía, 37 (detrás las urbanizaciones). Coordenadas GPS: 36.732223, -3.583240.
También hay un área de autocaravanas en la localidad de Torrenueva, a 11 km de Salobreña, muy cerca de la playa y de la Pasarela de Jolúcar. El precio es de 12 €/día, y los servicios de llenado de aguas, vaciado, duchas y electricidad se pagan aparte.
Ubicación: Calle Larra, 7. Coordenadas GPS: 36.69839, 3.48064.
Y en La Herradura hay un área para autocaravanas y caravanas situada entre el centro urbano y la playa. Dispone de electricidad, puntos limpios, de aguas grises, lavaderos, lavabos, duchas, lavadora, etc., y admite mascotas. El horario de recepción es de 8:30 a 22:00 h. Dispone de 40 plazas. Los precios varían en función de la temporada, entre 16 y 19 €/día, para autocaravanas y 45 /día para caravanas.
Ubicación: Calle Las Palomas , 6. Coordenadas GPS: 36.734653, -3.741451.
¿Qué ver en Salobreña?
Tanto el Castillo, que data del siglo X, como el casco histórico medieval están muy bien conservados, y es un placer callejear por sus estrechas y empinadas calles con sus casas encaladas y adornadas con flores. Sus playas, amplias, a un lado y otro de un peñón desde que el que se lanzan los más atrevidos a sus cristalinas aguas son de las más visitadas, y el valle en el que se encuentra tiene un clima subtropical que hace que la agricultura de la zona se caracterice por plantaciones de aguacates, chirimoyas y mangos. Un sendero, el Paseo de las Flores, desciende desde el castillo hasta las playas y ofrece algunos espectaculares miradores hacia la costa.
Castillo de Salobreña
Está ubicado en lo alto de un promontorio rocoso dominando la verde vega a un lado y el mar al otro, por lo que ofrece panorámicas magníficas desde sus torres.
Desde el siglo X ha sufrido profundas transformaciones. Durante el periodo nazarí albergó además un palacio real que también fue utilizado como prisión real. Entre otros aquí estuvo encerrado Muley Hacén, tío de Boabdil. Fue entregado a las tropas cristianas en 1489. Está formado por tres recintos: la alcazaba o alcázar nazarí, jalonada por cuatro torres, y otros dos construidos por los cristianos a finales del siglo XV, con la torre de acceso y la barrera exterior, flanqueada por dos torres más, y la Coracha, que protege una toma de agua con dos torres más. En el patio interior se está excavando la residencia real nazarí y se pueden ver algunas de sus dependencias.
Se accede desde una de las calles más bonitas de Salobreña, atravesando una de las torres. Pasead por sus murallas y torres y disfrutad de las espectaculares vistas.
Barrios del Brocal y del Albaycín
Estos barrios, cercanos a la fortaleza, corresponden al trazado medieval de la villa. Ambos están llenos de encanto, con sus calles laberínticas y llenas de color. Las del barrio del Brocal fueron construidas aprovechando el trazado de la Muralla, de la que solo quedan restos de una torre, El Torreón, y el barrio del Albayzín fue cementerio cristiano hasta 1898.
Peñón de Salobreña
Este promontorio rocoso es un punto destacado en la costa. Las aguas que la rodean tiene una abundante vida marina, y es habitual ver aquí pescadores con sus cañas. Sus paredes de roca son muy utilizadas como trampolín para saltar al agua. Vale la pena acceder a la parte superior del promontorio y dar un paseo por él, que ofrece también una buena panorámica de las playas y del pueblo.
Playas de Salobreña
El Peñón separa la línea de costa en dos zonas, a izquierda la gran playa de la Charca con el Paseo Marítimo, que se extiende hasta el río Guadalfeo, y a derecha la playa de la Guardia que llega hasta La Caleta. Esta es más tranquila y menos concurrida.
Si os adentráis más allá del río Guadalfeo descubriréis una playa más virgen entre cañaverales, que es la playa Punta del Río y que va hasta el campo de Golf de Playa Granada. Y más allá de La Caleta, siguiendo por la preciosa Senda Mediterránea encontraréis pequeñas calas entre los acantilados, como El Caletón.
En sus playas, además de relajaros al sol y disfrutar de sus chiringuitos, podéis hacer actividades acuáticas, como buceo, padelsurf, o paseos en kayak. Diversas empresas ofrecen actividades de este tipo.
Paseo de las Flores
Bajo el Castillo está este rincón rodeado de jardines que es un estupendo mirador sobre la vega y las playas.
Iglesia Nuestra Señora del Rosario, La Bóveda y Plaza del Ayuntamiento Viejo
La iglesia mudéjar del siglo XVI fue edificada sobre la mezquita musulmana. Sobresale su puerta lateral, con decorado de azulejería y la Torre, esbelta y rematada con almenas escalonadas.
Bajo la iglesia se encuentra La Bóveda, un bello pasaje medieval que comunicaba el barrio del Albaycín con la antigua Medina. Se apoya exteriormente sobre un tramo de la vieja muralla de la villa.
La plaza del Ayuntamiento Viejo, muy agradable con sus jardines y fuente centrales, ofrece un mirador sobre el casco antiguo bajo el que se encuentra la antigua cárcel.
Parque de la Fuente
En la Avenida del Mediterráneo, en dirección a la playa, se encuentra este parque que cuenta con bellos jardines y estanques con aves. Un lugar familiar y muy agradable y fresco especialmente en verano.
Rutas de senderismo y BTT por la zona
El entorno natural de Salobreña está marcado por los cultivos subtropicales, y podéis encontrar un entramado de caminos rurales y sendas entre las plantaciones de su vega. Otros caminos se adentran por los acantilados y hacia las montañas cercanas y los pueblos más al interior. Os proponemos algunas rutas:
- Castillejo de los Guájares
- Senda del Minchar
- Ruta BTT Salobreña-Ítrabo
- Ruta BTT Salobreña-Tablones
- Ruta BTT Motril-Faro Sacratif
Los alrededores de Salobreña
Muy cerca de Salobreña se encuentran Motril y Almuñécar, y un poco más lejos Nerja, ya en Málaga.
Motril
Es la ciudad más grande de la Costa Tropical y el centro comercial de la misma. Vale la pena pasear tranquilamente por las calles del centro para tomar el pulso a la ciudad y disfrutar de una parada en sus animadas terrazas. Está situada en la vega del río Guadalfeo rodeada de cultivos subtropicales, y se adentra hasta las playas, con bastante animación turística y la posibilidad de hacer deportes náuticos.
Destaca su tradicional cultivo de la caña de azúcar, de lo que da muestra el museo dedicado a la misma. Aún se pueden observar antiguos ingenios azucareros y sus chimeneas. Con origen en la caña de azúcar, en Motril se fabrica un estupendo ron. La gastronomía, como en los pueblos costeros cercanos, se basa en el pescado y el marisco, recién traído de la lonja del puerto.
Podéis visitar también su rico patrimonio monumental, con la Virgen de la Cabeza que domina la ciudad desde el cerro donde descansa, y sus museos, el Museo Preindustrial del Azúcar, situado en los restos de un ingenio del siglo XVI y el Museo de Historia.
Almuñécar
La antigua Sexi es una ciudad costera con amplia oferta turística y que encierra una importante historia, con lugares muy interesantes para visitar como el Castillo, la fábrica de salazones fenicia en el Parque el Majuelo, un valioso Museo Arqueológico y un acueducto y termas romanas. Además el casco histórico es un entramado de calles de origen musulmán, con casas encaladas y decoradas con flores y plantas. Es una ciudad muy viva, con calles comerciales llenas de gente y que os ofrecerá además otras atracciones como el Parque Ornitológico LoroSexi, el Acuario y el Parque Acuático Aquatropic.
En este post tenéis información detallada de nuestra visita a Almuñécar.
Nerja
Es otro municipio costero con mucho encanto. Está muy volcado en el turismo y sus calles están llenas de turistas, especialmente británicos. Eso hace que tenga un gran ambiente, pero también ha desvirtuado en parte el encanto de la localidad. Aún así, el centro histórico es muy interesante, que se asoma al mar en un gran mirador bautizado como “El Balcón de Europa” por Alfonso XII. Sus playas son extraordinarias y podréis hacer una gran variedad de actividades acuáticas. En sus cercanías se encuentra Maro, y el Parque Natural de los Acantilados de Maro.
Es también la puerta de entrada a los pueblos de la Axarquía. Muy cerca está Frigiliana, que merece una larga visita por sí solo. Un bellísimo pueblo blanco colgado en las montañas.
Lo más llamativo de Nerja es su Cueva. Una de las más grandes cavidades de la península con grandes salas de las que cuelgan gigantescas y preciosas estalactitas que se unen a las estalagmitas que salen desde el suelo.
Feria y fiestas
Salobreña ofrece uno de los mejores escenarios para la Semana Santa. Las hermandades transportan las imágenes religiosas a través de las estrechas calles y su pendiente mezclándose con las blancas fachadas y, ofreciendo un espectáculo impresionante para la vista.
El Día de la Cruz en mayo se convierte en la fiesta de la primavera: numerosos barrios y calles son decorados por sus vecinos con cruces y flores, convirtiendo sus rincones en un espectáculo de alegría y colorido
Como la mayoría de pueblos costeros el comienzo del verano se celebra con las hogueras de San Juan y el 16 de julio se celebra el día de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros. Lo más llamativo es la procesión por tierra y mar d la imagen de la Virgen.
La vida cultural, especialmente conciertos, se intensifica durante el verano, cuando la población aumenta significativamente. destacan el Festival Tendencias y el Festival Flamenco Lucero del Alba.
Gastronomía
Se basa en el pescado fresco del Mar Mediterráneo y frutas tropicales cultivadas en los alrededores, como mango, aguacate o chirimoya. En cocina de pescados destacan los espetos de sardinas, el pulpo al estilo Salobreña, las zarzuelas de mariscos, guisos de cazón y sopas de mariscos, y de la huerta local las ensaladas tropicales. En cuanto a postres es deliciosa la repostería de origen árabe, la leche rizada, y los helados de chirimoya y otras frutas tropicales.
Los chiringuitos de playa ofrecen un entorno muy agradable para tapear o comer, así como los bares del casco histórico.
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