La Boca de la Pescá, con sus aparentemente modestos 1518 metros, es una de las cimas más características de la media montaña granadina. Es muy reconocible por su forma, que aparenta una “pescá” con la boca abierta. Es de fácil acceso por un bonito sendero. Desde su cima podréis disfrutar de estupendas vistas hacia la altas cumbres de Sierra Nevada, a los Alayos, el Trevenque, la Vega de Granada y las sierras que la rodean.
El acceso más sencillo a la Boca de la Pescá se inicia en el aparcamiento del Canal de la Espartera. Sin embargo la ruta que os proponemos va desde el río Dílar a la Boca de la Pescá. Este recorrido es más duro y exigente pues tiene bastante más desnivel.
Provincia: Granada
Localidad: Dílar
Distancia: 8,6 km
Desnivel acumulado: 732 m
Duración: 2 h 45 min
Tipo de ruta: Circular
Nivel de dificultad: Moderado
Apta para perros: Sí
Apta para niños: No
Época recomendada: Cualquier época del año. Evitar los días y horas de más calor.
Fuentes: No
Restaurantes: En Dílar.
Fecha de realización: 20/06/2021
El lugar para aparcar e inicar la ruta Río Dílar – Boca de la Pescá es junto al Mesón Los Alayos, situado junto al río Dílar y justo antes del área recreativa. Las coordenadas GPS son: 37.0636760, -3.5581223. La pista sigue, aunque cerrada con cadena, y os lleva al área recreativa, con sus pozas de agua fresca que en verano os tentarán para que os quedéis en ellas. La pista se dirige hacia la Central Eléctrica de Dílar. Un poco antes de llegar a la misma parte una senda a la izquierda señalizada con postes que es donde se inicia el fuerte ascenso.
El ascenso, que sube en zigzag por la ladera, es exigente, tiene una fuerte pendiente y en algunos tramos hay bastante roca y grava sueltas. Conforme ganamos altura vamos disfrutando de preciosas vistas del Barranco del río Dílar y los Atalayones. Si tenéis suerte, como nos ha pasado a nosotros, y según la época del año, podéis encontrar que baje bastante agua del aliviadero del Canal de la Espartera y os acompañará el sonido de las cascadas que se forman en el barranco por el que vais ascendiendo.
Hacia la mitad de la senda hay que cruzar el arroyo en un punto en el que se forman pequeñas cascadas. Aquí nuestros perros, Leo y Lola, han disfrutado de lo lindo dándose un merecido baño en el arroyo, como antes hicieron en el río Dílar. Cada vez que encuentran un río o una acequia van de cabeza al agua.
El sendero nos lleva a la caseta desde donde parte el tubo por el que desciende el agua del Canal de la Espartera a la Central Eléctrica de Dílar. Por la parte de atrás de la caseta encontraréis un espectacular mirador hacia el fondo del barranco y las sierras que os rodean.


A partir de este punto hay que seguir a la izquierda por la senda que va paralela al canal. Al principio nos encontramos con la abertura por la que desagua el canal, que se precipita barranco abajo, formando en su recorrido algunas cascadas antes de llegar al río Dílar.
Un poco más adelante atravesaréis un pequeño bosque de pinos y ya tendréis vistas hacia la otra vertiente, divisándose al fondo la Vega de Granada. Justo cuando acaba el pinar hay que desviarse a la derecha para iniciar el último ascenso fuerte hasta la cima. Nosotros hemos tomado un sendero que va paralelo al pinar y que nos permite acortar un poco para incorporarnos a la senda señalizada. También podéis seguir el sendero un poco más y tomar el sendero señalizado que viene del aparcamiento del Canal de la Espartera. Es un poco más largo, pero con menos pendiente. Cuando enlazamos con el sendero señalizado solo queda seguirlo para llegar arriba.
Encontraréis dos cumbres, en la primera hay una caseta de vigilancia forestal. Es un punto ideal para admirar el paisaje, ya que ofrece una visión excepcional de 360º. Aún os queda descender a un collado para volver a subir a la Boca de la Pescá, con una solitaria encina en la cumbre.
Para el regreso podéis acortar un poco descendiendo por un cortafuegos que parte desde la caseta de vigilancia. Es un descenso pronunciado y con terreno muy suelto, en el que hay que tener un poco de precaución. Os conecta con el sendero del Canal de la Espartera por el que ya habéis pasado antes, y por el que se vuelve al punto de inicio.
El final es muy fresco. Quizá ahora sí haréis una merecida parada en las pozas que hay en el área recreativa.
Otras rutas por la zona:
Para reponer fuerzas os recomendamos hacer una parada en Casa Pilatos, un lugar con un encanto especial, en pleno centro de Dílar. Nosotros siempre que hacemos una ruta por aquí lo visitamos, ya sea para desayunar o al terminar para tomar unas cervezas fresquitas o comer.
Para más información y descargar el track pinchad en el siguiente enlace: